"Me gusta esta ubicación, es muy bonita y puedo sentir que estoy en Egipto. Lo único que digo es que el resto de regalos están protegidos, y este templo, no", señalaba en declaraciones recogidas por Efe comparando con el resto de monumentos cedidos a Estados Unidos, Holanda e Italia.
Desde el Ayuntamiento de Madrid, el director general de Patrimonio, Luis Lafuente, afirmaba que "en unas semanas" se procederá a "reparar la cubierta para evitar cualquier tipo de filtración" mientras que al mismo tiempo se trabaja en "un estudio perimetral de humedades".
Además tanto el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, como la vicealcaldesa, Begoña Villacís, coincidían en que desde la corporación municipal "encontrarán las medidas necesarias para la protección del templo" trabajando con los expertos técnicos en conservación.
"Tiene que haber una forma para cubrirlo sin deformarlo", incidía el egiptólogo que recordaba a los dirigentes madrileños que a estas donaciones "hay que darles valor" porque sino "en cien años se caerá abajo".
Desde el Área de Cultura estudian asimismo implantar un centro de acogida e interpretación en el templo para "potenciar sus servicios museísticos". Un proyecto que desde el departamento que dirige Andrea Levy se prevé poder desarrollar a lo largo de este mismo año y donde tampoco descartan proceder a su cubrimiento pese al elevado coste presupuestario.
Lo que se descarta desde el Consistorio es la devolución de "uno de los monumentos más reconocidos" de la capital, definía Villacís. "El templo se queda y se estudiarán todas las opciones", añadía. Una línea que siguió el alcalde: "No hay intención de devolverlo, pero sí de adoptar todas las medidas de conservación".
Artículo: Pablo R. Roces.