Es un hecho bien sabido que la religión en el antiguo Egipto era un factor casi indispensable en la vida de todos los habitantes del país africano, por lo que no es de extrañar que los mismos pobladores de Deir el-Medina hayan construido una gran cantidad de templos y monumentos dedicados a sus dioses. Por lo que el lugar se vuelve un lugar ideal para realizar turismo cultural, ya que tendremos en una pequeña área, una gran cantidad de cosas interesantes para observar.
Deir el-Medina fue siempre básicamente un pequeño poblado de familias trabajadoras, por lo que si tienen la suerte de visitar dicho maravilloso destino, debemos advertirles que no se encontrarán con los lujos y excentricidades que e pueden ver en los lugares donde solían vivir las personas más poderosas del antiguo Egipto, pero si podrá ver de manera muy real, el modo en el que los trabajadores del antiguo Egipto solían vivir.